Comprendiendo la defensa

Enmanuel Lasker
Para Lasker la defensa debe basarse en dos principios en  la economía y en la proporción.


Cuando Enmanuel Lasker valora las teorías defensivas de Steinitz, destaca que el ideal de una posición para la defensa es aquella que no tiene ninguna línea minoris resistentiae, significando que todas sus líneas de resistencia sean iguales de fuertes; y si este ideal no puede alcanzarse, si aproximarse lo más posible a él.

La defensa debe basarse como señaló Lasker en su tiempo, en dos principios:

- La economía: Hacer las mínimas concesiones posibles y dedicar sólo los recursos y tiempos necesarios y,

- La proporción, el objetivo de un ataque debe ser proporcionado a la ventaja sobre la que se basa el plan de ataque. De la misma manera la concesión del defensor también es proporcionada. En nuestro objeto de estudio la proporción se rompe con el avance 16. g4? porque este ataque se basa en que el peón e5, proporciona al blanco ventaja en espacio en el ala de rey y, es este fuerte peón central el que está siendo sacrificado.

Estos clásicos advierten que tanto en la defensa como en el ataque, hay que sopesar el valor de los puntos: fuertes, débiles, importantes y menos esenciales. En muchas posiciones esto es vital y, en la partida que estudiamos será ineludible el cuestionamiento ¿tienen igual valor los peones e5 (blancas) y d4 (negras)?. Algunas de las partidas incluidas nos llevan a la misma problemática.

Por otra parte, el sistema defensivo planteado de apertura confía en sus líneas de resistencia y, las tareas defensivas concretas son presionar al peón e5 constantemente, resolver el desarrollo del alfil dama y, cuidar de las líneas defensivas lo que se traduce en mantener las columnas g y h cerradas, aunque sea por peones adversarios. Como consecuencia del éxito en la ejecución de las tareas defensivas existirá la posibilidad de contraatacar.

Aronian, L (2794) - Caruana, F (2784) [D37]                                              Torneo de Candidatos de la FIDE, Berlin 2018 (7.2), 18.03.2018

1.d4 f6 2.c4 e6 3.f3 d5 4.c3 dxc4 5.e4 b4 6.g5 h6 7.xf6 xf6          8.xc4 c5 9.0–0 cxd4 10.e5 d8 11.e4 0–0 12.e2 e7

Después de  12...♗e7

El alfil debe defender el flanco rey, su permanencia en b4 carece de sentido.

Incluimos la siguiente partida porque nos muestra que el plan de avance g4–g5 ya se había implementado y, no carece de fundamento. Este sería un punto de contacto con la partida objeto de estudio, pero hay una diferencia importante, el papel de la Dama negra:

-En nuestra partida principal mantiene presión constante sobre e5.

-En la partida incluida defiende d4 y la presión sobre e5, sólo actúa como defensa indirecta, en caso de que el blanco capture d4. 12...d7 13.ad1 b6 14.g4 f6 15.exf6 xf6 16.xd4± d5 17.xe6 xe6 18.xd5 ae8 19.c4 h8 20.xe6 xe6 21.d4 b5 22.f3 a5 23.g2 b6 24.d2 a5 25.d7 xb2+ 26.f2  1–0 Bacrot, E (2705)- Pelletier, Y (2604) Nancy 2013;

Jugando con negras este sistema defensivo, Aronian prefirió resolver el problema de desarrollo del alfil dama, como prioridad, valiéndose de las maniobras c6–e7 y g6 o c6–b8 acosó al peón e5.

12...d7 13.fd1 c6 14. g3 (14.a3!? e7 15.b4 b8 Con la vista y las intenciones en e5. (15...b6 16.g3 fd8 17.e4 etc.) 16.g3 b5 17.xb5         (17.d3 a5!„) 17...xe5 18.xd7 xd7 19.xd4 e5= 1/2–1/2 posteriormente, Grischuk, A (2736)-Aronian, L (2781) Linares 2010)

14...c5 15.a3 e7 16.e4 b6 17.xd4 g6 La maniobra e7–g6 establece claramente al peón e5 como el objetivo de ataque del bando negro. 18.h5         (18.f3 c7 19.d6 c6 20.b5 xf3 21.xf3 c5) 18...h4 19.xh4 xh4 20.a4 (20.d6 g6=) 20...g6 21.a5 xd4 22.xd4 c6 23.b4

(Merecía consideración 23.f4 entrega material, apostando a un juego activo de piezas. 23...xf4 24.d6 xg2 25.a6 bxa6 26.c1 e3 27.xa6 e8 (27...d5? 28.f2²; 27...d7 28.c7 ad8 29.d3 d5 30.xa7 f6 31.exf6 xf6 32.b4) 28.d3 f5 29.c7) 23...xe5 24.b5 xe4 25.xe4 d7 26.d4 c5 (mejor 26...f6) 27.ad1 fc8 (27...b6 28.axb6 axb6 29.d6 fb8 30.c6 d8³) 28.h4 f8 29.h5 e7 30.g4 g8 31.e2 b6 32.f3 ac8 33.axb6 axb6 34.a1 c7 35.c6 f5 36.g3 f7 37.d1 a7 38.g6 a3 39.g4 fxg4 40.xg4 h3 41.e4 xe4 42.xe4 xh5 43.d7+ f6 44.d6 e5 45.xe5 xe5 46.xb6 g5 47.b7 h5 48.b6 h4 49.f7 d8 50.b7 d1+ 51.g2 b1 52.f3 1/2–1/2 Ding,L (2771) -Aronian,L (2802) Tiblisi, 2017.

El pronto desarrollo de la Dama, defiende la ventaja material, lo que justifica las concesiones de espacio central que se han hecho y, libera el cuadro d8 para la torre, con lo cual f8 puede ser utilizado por una pieza menor, alfil o caballo para defender el flanco rey pero, no es un cuadro eficiente para la Dama.

12...b6 13.ad1 d8 14.g3

(14.d3 e7 15.b1 a6 16.d2 c6 17.f6+ f8? Este sacrificio especulativo debió ser aceptado. 17...gxf6 18.xh6 (18.exf6 xf6 19.xh6 g7–+) 18...f5 19.d3 f8 20. g5+ g7 21.d2 f8 22.f4 a5 23.b3 c7 24.g3 xe5 25.fxe5 xe5 Y a las blancas les cuesta demostrar la validez de su sacrificio.) 18.h5 b5 19.d3 a5 20.f4 d7 21.g3 g5 22.h4 e8 23.hxg5 hxg5 24.g7+ f8 25.h2 f5 26.xf5 exf5 27.h8+ f7 28.h7+ e8 29.g6+ 1–0 Kunin,V (2502)- Ninov,   N (2427) Eschborn 2013)

14...e7 15.h4 a6 16.h5 c5 (16...b4 17.a3 d5 18.xd4) 17.xd4 d7 18.g4 la iniciativa blanca es peligrosa 18...f8 19.b4 xb4 20.f5 Aprovechando la indefensión de la Dama en b4 e intensificando las amenazas sobre h6 y g7. 20...h8 21.fxg7 b5 22.f4 ( El ataque resulta decisivo sumando una cuarta pieza al ataque. 22.d4 c3 (22...bxc4 23.f4+–; 22...xc4 23.xc4 bxc4 24.c1+–) 23.f4 xe5 24.f6+–)

22...xg7 23.xg7 xg7 24.f6+ g8 25.d4 xc4 26.xc4 bxc4 27.xh6 c6 28.g5+ f8 29.h5± e4 30.c1 d4 31.h6 g6 32.f6 e8 33.g3 d7 34.g7+ e7 35.h7 xh7 36.xh7 xe5 37.g7 d5 38.c3 (38.f4+–) 38...c8 39.g5+ d6 40.c1 dc5 41.a3 a5 42.f4 d3 43.xc4 b4 44.xc5 xc5 45.b2 f5 46.a3 c6 47.f6 d5 48.g2 d4 49.f8+ c6 50.a4 c7 51.h3 c6 52.h4 c7 53.g5 b7 54.f6 d7 55.e8 d5 56.f8 d7 57.h8 d5 58.e7 c7 59.a8 d7+ 60.f6 c6 61.a6 d4 62.e2 d6 63.c4 d4 64.c5 d5 65.c2 d6 66.c3 b7 67.c5 c7 68.b5 d5 69.b1 d6 70.b2 b4 71.f7 c6 72.b3 d8+ 73.f6 c6 74.c3 b7 75.c5 c7 76.f7 d5 77.c4 d6 78.c3 b7 79.c1 c7 80.b2 c8 81.f6 c7 82.b1 b4 83.b3 c6 1/2–1/2 Lupulescu,C (2634)-Vallejo Pons,F (2695), Legnica 2013.

13.ad1

Después de  13.♖ad1

13.g3 c6 14.e4 g6

(14...d7 15.a3 Priva al caballo del salto a b4 que liberaría la casilla c6 para el alfil, al mismo tiempo propicia el juego en ambos flancos con el avance b4. 15...g6 16.b4 a6 17.h4 g7 El blanco conserva una peligrosa iniciativa.)

15. h4g7 16.h5 g5 17.h2 c7

Devolver el material, despejando el cuadro d4, para proponer el cambio de Damas, es un interesante recurso defensivo. 17...d3 18.xd3 h8 19.g4 d4=)

18.d3 h8 19.g4 b4 (19...f8 20.f4 e8) 20.f4+– gxf4 21.xf4 g5 22.f3 xd3 23.xd3 d7 (23...b6 24.e4+– (24.af1+–)) 24.xf7+! xf7 25.g6+ e7 26.g7+ d8 27.xh8+ e8 28. e4 e7 29.xg5 xg5 30.f6 e7    31.h7+ f7 32.e4 (Muy fuerte es la secuencia 32.f1 f8 33.e1 d2          34.e4) 32...d8 (32...e3+ 33.xe3 dxe3 34.e1 d8 35.xe3 d2 36.b3 b6 37.a3 a5 38.b3 e2 39.b5 e8 40.xe8 xe8 41.f1 Y las blancas deben imponerse en el final.) 33.xb7+ f8 34.h7+, 1–0 Ruck, R (2532) -Natsidis,C (2335), Panevezys 2017.

13...c7 14.d3

14.g3 d8 15.h5 g6 16.f4 c6 17.e4 f8 18.h4 g7 19.fe1 d7 20.d3 e8 21.b1 d3 22.xd3 e7 23.h5 g5 24.c1 c6 25.b4 xe4 26.xc7 xf3 27.gxf3 c6 28.xc6 bxc6 29.xc6 ac8 30.xc8 xc8 31.g2 1/2–1/2 Moiseenko,A (2671)-Meier,G (2644), Jerusalén 2017

14...d7 15.c1

15.g3 d8 Como estamos apreciando, por medio de las partidas incluidas, el GM Meier muestra el potencial de las líneas defensivas negras en sus partidas. 16.b1 (16.e4 f8 17.c1 a5 18.h5 d7 19.xb7 ab8 20.e4 b5 21.g4 g6 22.f4 h5 23.g3 xd3 24.xd3=) 16...f8 17.h5 d3 18.xd3 d7 19.c1 c6 20.c4 g6 21.f6+ g7 22.e4 d7 23.xc6 bxc6 24.xd7 xd7 25.d4 b7 26.xd8 xd8 27.c1 d5 28.b3 d7 29.h3 c5 30.h2 b6 1/2–1/2 Iotov,V (2560)-Meier,G (2647), Herndon 2012.

15...a5 16.g4?

Después de 16.g4

Las blancas sobrevaloran sus posibilidades al ataque buscando la ruptura g5 y, entregando el peón central e5. En próximas partidas veremos las jugadas

16.ed2; y 16.g3.

16...xe5! 17.xe5 xe5 18.f4 a5 19.g5 d8

19...g6 20.gxh6 h7µ

20. h4 d7 21.gxh6 g6 22.h5 h8

Para entender los mecanismos defensivos del negro hay que preguntarse ¿cuál es la ventaja del cuadro h8, en relación al cuadro h7? Sin dudas, que h8 no propicia la posibilidad de un jaque de caballo, ni sacrificios de extracción del rey en g6 y el blanco carece de alfil de cuadros negros.

22...h7 23.g2 (23.c5 xc5 24.hxg6+ fxg6 25.xg6+ xg6 26.g4+ f7 27.h5+ f6 28.g5+ f7 29.h5+=) 23...h8 (23...c6 24.f5 exf5 25.xf5±) 24.g5 xg5 25.fxg5 c6 26.g3 b8 27.h4 e5 28.ce1 d5 29.g3 h1+ 30.f2 d5 31.e5+–.

23.h2

Ya que la columna h va a permanecer cerrada, las blancas se concentran en g.

23.hxg6 fxg6 24.c5 xc5 25.xc5 c6 o 25...f6.

23...c6 24.f3

24.f2 d5 25.hxg6 fxg6 26.g1 g8 27. g5 af8 28. c4 d3! 29. xe6 xe6 30. xe6 f6 para cuestionar la seguridad de las piezas menores blancas.

24...d6

24...d5 25.h3 g8 26.g1 f5 27.h7 g7 28.g5 xg5 29.xg5 gxh5 30.xg7 h1+ 31.g3 g1+ 32.h4 xg7–+

25.f2 c7 26.h3 e7 27.g5

Evade la trampa 27.xd4+ e5! 28.g1 exf4–+

Era necesario continuar concentrando piezas. 27.g1.

27...e5!

Con este contragolpe central, las negras pasan al contraataque. Lo sustenta el conocido axioma: A un ataque de flanco se reacciona con un contragolpe central. En el presente caso hubo que esperar por el momento oportuno.

Válido 27...gxh5.

28.xc6

Las blancas no pueden escatimar en sacrificios.

28...bxc6 29. xf7+ xf7 30.hxg6 f6

Mejor 30...xf4 31.xf4 (31.g7+ g8 32.xf4 (32.c4+ h7 33.xf4 exf4 34.g2 e3+–+) 32...exf4 33.xd4 e6+–+) 31...exf4 32.xd4+ e5 33.g7+ g8 34.c4+ h7 35.d3+ xh6 36.g8 xg8 37.xg8 h8 38.b3 g5+ 39.g2 xb2+µ.

31. g7+

31.h4!?

31...g8

Después de  31...♔g8

Esta es una posición crítica.

32.c4+?

En ajedrez, insistimos, el orden de los factores sí altera el producto.

32.h4 exf4 Para controlar el acceso de la torre a g3. (32...e4 33.h7+ xg7 34.g3+ h8 35.g8+ xg8 36.hxg8+ xg8 37.c4+ g7 38.g5+ h7 39.g8+ h6 40.g5+=) 33.c4+ h7 34.d3+ consigue las tablas. 34...g8 35.c4+.

32...h7 33.h4 e4 34.g3

34.g8+ xg8 35.xg8+ xg8 36.g3+ h8 37.g5 f8

34...xf4 35.g8+ xg8 36.xg8+ h8 37.g7 f8

0–1

Todas las partidas se encuentran en este articulo.

WGM Vivian Ramón Pita.


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